Con el mal tiempo, nuestros pies no son ajenos a las inclemencias, provocando diversas agresiones en la piel y en los músculos que provocan malestar en los pies. Hoy queremos acercaros los posibles efectos adversos que tiene y que debes proteger.
- La sequedad. El frío provoca que los aceites naturales que segregan nuestros pies se evaporen de manera más rápida de la que se genera, provocando una sequedad en la piel que puede causar durezas y otro tipo de molestias. Para protegerlos, lo mejor es aplicar cremas especiales ricas en serum.
- Durezas. Las personas propensas a este tipo de malestares deben tener más cuidado, ya que con los cambios de temperatura y los excesos de la calefacción, las durezas y callos puede provocar males mayores. Un buen cuidado pasa por acudir a un especialista que revise tu estado y mejore tu situación, evitando dolores y otros problemas.
Para cuidarte los pies, lo mejor es hacer un pequeño tratamiento antes de irse a dormir, un momento idóneo donde tus pies están relajados, calientes y donde todo tipo de cremas y aceites que te apliques contribuirán a mejorarlos y evitar males mayores.
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