Los hongos de pies o «pie de atleta« se produce a través de la sudoración y el mal olor de los pies favoreciendo a la aparición de hongos en esta parte del cuerpo.

Las personas que más sufren esta patología de pie de atleta son los hombres entre 15 y 45 años, ya que suelen tener el hábito de utilizar zapatos cerrados y calcetines que no transpiran demasiado. Esto suele ocurrir con frecuencia en épocas de verano, donde el intenso calor favorece a la aparición de hongos de pies. 

Más del 60% de la población española sufren esta patología del pie de atleta, mucho más de lo que se pueda llegar a pensar. Aún así son más los afectados por no seguir un tratamiento adecuado.

«El pie de atleta es una infección causada por los hongos de los pies que afecta a los pliegues interdigitales, la planta y los bordes de la zona».

 

El pie de atleta se puede presentar de varias formas. A veces de un modo más suave que ni siquiera el paciente sabe que lo padece hasta que acude a la consulta; o bien de una forma tan fuerte que las pústulas del pie obligan al paciente a no poder llevar una vida normal.

Unas de las señales más indicativas de esta enfermedad son las pequeñas molestias a modo de pompas entre los dedos, lo que conocemos como los hongos. Estos se alimentan de la queratina de la piel y se multiplican a gran velocidad, ya que buscan esta misma sustancia en otras partes del pie.

«¿Sabías que el 25% de la población de los países desarrollados padecerá esta infección en algún momento de su vida?»

 

En CLÍNICA GIMÉNEZ ÁGRELA recomendamos a los pacientes secarse bien los pies después de lavárselos, especialmente entre los dedos, así como calzar zapatos transpirables, y sobre todo, utilizar zapatillas en gimnasios, piscinas, vestuarios y hoteles.